Fuente: Clarín.
Por: Paula Lugones
Washington. Corresponsal
En una decisiva jornada electoral en Estados Unidos, Donald Trump arrasó esta noche en Indiana y dio un golpe devastador a su rival Ted Cruz: el senador ultraconservador anunció que se retira de la competencia y deja el camino libre al controvertido magnate para ser el candidato a la presidencia de los Estados Unidos por el Partido Republicano.
Sin Cruz en la carrera, Trump ya es el “virtual candidato” republicano, según consignaban todos los medios. La designación formal del magnate, que ocurrirá en la convención de fines de julio en Cleveland, cuando terminen las internas que faltan, marcará unmomento extraordinario en la historia política de Estados Unidos: el magnate será el primer abanderado del partido que no ha ocupado nunca un cargo electivo desde Dwigth D. Eisenhower, un general cinco estrellas y comandante de las Fuerzas Aliadas en la Segunda Guerra Mundial.
“Suspendemos esta campaña, pero no suspendemos la lucha por nuestra libertad, nuestra Constitución, nuestros valores cristianos”, dijo Cruz a una audiencia de seguidores apesadumbrados, rodeado de su familia. El senador por Texas se jugaba “a todo o nada” en Indiana, según había dicho a los votantes antes de las elecciones en ese estado industrial en el norte del país. El creía que allí tenía las mejores y quizás las últimas chances de frenar la carrera ascendente de Trump, que venía de ganar en forma contundente seis primarias de manera consecutiva.
Pero Trump logró anoche en Indiana otro triunfo rutilante, con más de 15 puntos sobre Cruz. John Kasich, el gobernador de Ohio, conseguía por su parte cerca del 8%. En una jugada de últio momento, Cruz y Kasich habían hecho una alianza “anti-Trump” en ese estado -solo hizo campaña allí el senador- pero la estrategia evidentemente no funcionó.
“Es una noche hermosa”, dijo Trump en su discurso de victoria, en el que por primera vez se lo vio emocionado. Criticó la campaña negativa de su adversario y dijo que Estados Unidos venía perdiendo en el terreno militar y económico estos últimos años. Y que él, un ganador, llevaría al país a la senda de la victoria. “Vamos a ganar en noviembre”, vaticinó.
Matemáticamente sin posibilidades de obtener la mayoría de delegados necesaria, Cruz esperaba que Indiana sirviera para impidir que Trump llegue a los 1.237 delegados que la garantizan la candidatura para así poder tener chances en una convención “disputada”. Sin Cruz en la carrera, ya no quedarán discusiones en el recinto.
La campaña de Cruz había centrado su mensaje en los “valores” conservadores, su oposición al aborto y los transexuales. Pero Trumpcaptó mucho mejor el humor de los votantes, que están hartos de los políticos de Washington y buscan un “outsider”. Además, en un estado industrial, Trump enfocó hábilmente su mensaje en el empleo y en la protección de las empresas locales que pierden competencia frente a México o China. Según las boca de urna, la gran preocupación de los votantes en Indiana, como la de buena parte del país es la situación económica del país. Por eso el magnate no perdió tiempo y salió a criticar a su probable rival demócrata: “Hillary sería una pésima presidenta” y resaltó que ella apoyaba los tratados de libre comercio, que según él perjudica el empleo.
En la interna demócrata, el senador Bernie Sanders se impuso a Hillary Clinton en Indiana. Igualmente la ex secretaria de Estado marcha con comodidad al frente de la carrera por los delegados y su nominaciónya casi es un hecho. Según una encuesta de NBC, Trump resultaría derrotado en las elecciones presidenciales del 8 de noviembre frente a Hillary. Ella se impondría 43% a 37%. Pero nada es definitivo frente a un candidato impredecible como Trump, por el que pocos apostaban cuando se lanzó a la carrera y ahora ya es “virtual candidato”.
En una decisiva jornada electoral en Estados Unidos, Donald Trump arrasó esta noche en Indiana y dio un golpe devastador a su rival Ted Cruz: el senador ultraconservador anunció que se retira de la competencia y deja el camino libre al controvertido magnate para ser el candidato a la presidencia de los Estados Unidos por el Partido Republicano.
Sin Cruz en la carrera, Trump ya es el “virtual candidato” republicano, según consignaban todos los medios. La designación formal del magnate, que ocurrirá en la convención de fines de julio en Cleveland, cuando terminen las internas que faltan, marcará unmomento extraordinario en la historia política de Estados Unidos: el magnate será el primer abanderado del partido que no ha ocupado nunca un cargo electivo desde Dwigth D. Eisenhower, un general cinco estrellas y comandante de las Fuerzas Aliadas en la Segunda Guerra Mundial.
“Suspendemos esta campaña, pero no suspendemos la lucha por nuestra libertad, nuestra Constitución, nuestros valores cristianos”, dijo Cruz a una audiencia de seguidores apesadumbrados, rodeado de su familia. El senador por Texas se jugaba “a todo o nada” en Indiana, según había dicho a los votantes antes de las elecciones en ese estado industrial en el norte del país. El creía que allí tenía las mejores y quizás las últimas chances de frenar la carrera ascendente de Trump, que venía de ganar en forma contundente seis primarias de manera consecutiva.
Pero Trump logró anoche en Indiana otro triunfo rutilante, con más de 15 puntos sobre Cruz. John Kasich, el gobernador de Ohio, conseguía por su parte cerca del 8%. En una jugada de últio momento, Cruz y Kasich habían hecho una alianza “anti-Trump” en ese estado -solo hizo campaña allí el senador- pero la estrategia evidentemente no funcionó.
“Es una noche hermosa”, dijo Trump en su discurso de victoria, en el que por primera vez se lo vio emocionado. Criticó la campaña negativa de su adversario y dijo que Estados Unidos venía perdiendo en el terreno militar y económico estos últimos años. Y que él, un ganador, llevaría al país a la senda de la victoria. “Vamos a ganar en noviembre”, vaticinó.
Matemáticamente sin posibilidades de obtener la mayoría de delegados necesaria, Cruz esperaba que Indiana sirviera para impidir que Trump llegue a los 1.237 delegados que la garantizan la candidatura para así poder tener chances en una convención “disputada”. Sin Cruz en la carrera, ya no quedarán discusiones en el recinto.
La campaña de Cruz había centrado su mensaje en los “valores” conservadores, su oposición al aborto y los transexuales. Pero Trumpcaptó mucho mejor el humor de los votantes, que están hartos de los políticos de Washington y buscan un “outsider”. Además, en un estado industrial, Trump enfocó hábilmente su mensaje en el empleo y en la protección de las empresas locales que pierden competencia frente a México o China. Según las boca de urna, la gran preocupación de los votantes en Indiana, como la de buena parte del país es la situación económica del país. Por eso el magnate no perdió tiempo y salió a criticar a su probable rival demócrata: “Hillary sería una pésima presidenta” y resaltó que ella apoyaba los tratados de libre comercio, que según él perjudica el empleo.
En la interna demócrata, el senador Bernie Sanders se impuso a Hillary Clinton en Indiana. Igualmente la ex secretaria de Estado marcha con comodidad al frente de la carrera por los delegados y su nominaciónya casi es un hecho. Según una encuesta de NBC, Trump resultaría derrotado en las elecciones presidenciales del 8 de noviembre frente a Hillary. Ella se impondría 43% a 37%. Pero nada es definitivo frente a un candidato impredecible como Trump, por el que pocos apostaban cuando se lanzó a la carrera y ahora ya es “virtual candidato”.
Comentarios
Publicar un comentario